Cierre de la biblioteca del Ministerio de Cultura
Lima, 9 de abril de 2014
Señores
Junta Directiva del Sindicato Unitario de Trabajadores SUTINC. D.L.728
Junta Directiva del Sindicato Único de Trabajadores del Ministerio de Cultura. D.L. 276 - SUTRANC
Presente.-
Junta Directiva del Sindicato Unitario de Trabajadores SUTINC. D.L.728
Junta Directiva del Sindicato Único de Trabajadores del Ministerio de Cultura. D.L. 276 - SUTRANC
Presente.-
Los suscritos nos dirigimos a ustedes para saludarlos y expresar nuestra preocupación porque la Biblioteca Institucional (BI), unidad de gestión donde laboramos, dejaría de funcionar. Al respecto:
1. Ayer, 8 de abril, fuimos informados por el Coordinador de la Biblioteca que estamos a la espera de un documento que inicie las labores de embalaje del repositorio.
2. La Biblioteca Institucional se encuentra en el Reglamento de Organización y Funciones del Ministerio de Cultura. Los trabajadores de la BI observamos que la reubicación de la biblioteca no dispone de espacio adecuado para su instalación. La visita de los proveedores para cotizar el embalaje y traslado no prevé –por lo conversado con ellos- la reinstalación. Si así fuera estamos ad portas a la desactivación de la Biblioteca Institucional.
1. La reubicación de la Biblioteca tendría que formar parte de un Plan de manejo espacial y funcional de la sede central del MINCUL para que áreas afines compatibilicen y se optimicen los servicios.
2. La nueva estructura funcional de la BI facilitó un posicionamiento institucional; resultado: mayor incremento de usuarios, presencia en el portal institucional (web), mejoramiento del servicio al usuario porque se reciben consultas en línea, adquisición de una fotocopiadora multifuncional para realizar servicios de fotocopiado y escaneo para los usuarios, se implementa el servicio de WI-FI, se comienza a imprimir el Código de Barrras a los libros de la colección Schreiber, ejecución del proyecto Memoria bibliográfica del Ministerio de Cultura, etc.
3. Tendemos a convertirnos en una biblioteca estatal líder porque empezamos a aplicar desde este año el Sistema libre Integrado de Bibliotecas Koha y el ingreso de los registros bibliográficos de la BI al formato MARC (anteriormente en Excel). El bibliotecólogo de la BI, con los especialistas de la Oficina General de Estadística y Tecnología de la Información y Comunicaciones, capacitó al personal de la biblioteca en las referidas aplicaciones.
4. En la BI existen valiosas colecciones. Mencionaremos entre las más importantes a las Colecciones Luis E. Valcárcel, Fernando Cabieses y Jorge del Prado.
Colección Luis E. Valcárcel
Un hito histórico en la formación del Ministerio de Cultura fue la decisión del gobierno de Sánchez Cerro de crear el Museo Nacional (1931), dirigido por Luis E. Valcárcel. Concibió un sistema de protección del patrimonio a través de los Museos Nacionales, la sede fue el entonces Museo de Arqueología Peruana (MAP), hoy Museo Nacional de la Cultura Peruana. En 1932 fue publicado el primer volumen de la Revista del Museo Nacional.
La entrega de la Colección Luis E. Valcárcel al Museo de la Nación para que sea custodiado en su biblioteca cerró un importante ciclo del papel de Valcárcel como gestor cultural. Que la Biblioteca del Ministerio de Cultura mantenga en su repositorio tan valiosa colección fortalece la memoria institucional.
Colección Fernando Cabieses
El Museo de la Salud fue una entidad promovida por Fernando Cabieses. Los bienes del referido museo pertenecen a la Beneficencia Pública. La presidencia de F. Cabieses en el Proyecto Especial Museo de la Nación fue propicia para que el gestor trasladara los bienes culturales al Museo de la Nación. Los libros, tesis, monografías, revistas y folletos fueron enviados a la biblioteca del M.N. La colección Cabieses (legalmente colección del Museo de la Salud) se relaciona con la instalación del Museo de la Nación y forma parte de su herencia.
Un hito histórico en la formación del Ministerio de Cultura fue la decisión del gobierno de Sánchez Cerro de crear el Museo Nacional (1931), dirigido por Luis E. Valcárcel. Concibió un sistema de protección del patrimonio a través de los Museos Nacionales, la sede fue el entonces Museo de Arqueología Peruana (MAP), hoy Museo Nacional de la Cultura Peruana. En 1932 fue publicado el primer volumen de la Revista del Museo Nacional.
La entrega de la Colección Luis E. Valcárcel al Museo de la Nación para que sea custodiado en su biblioteca cerró un importante ciclo del papel de Valcárcel como gestor cultural. Que la Biblioteca del Ministerio de Cultura mantenga en su repositorio tan valiosa colección fortalece la memoria institucional.
Colección Fernando Cabieses
El Museo de la Salud fue una entidad promovida por Fernando Cabieses. Los bienes del referido museo pertenecen a la Beneficencia Pública. La presidencia de F. Cabieses en el Proyecto Especial Museo de la Nación fue propicia para que el gestor trasladara los bienes culturales al Museo de la Nación. Los libros, tesis, monografías, revistas y folletos fueron enviados a la biblioteca del M.N. La colección Cabieses (legalmente colección del Museo de la Salud) se relaciona con la instalación del Museo de la Nación y forma parte de su herencia.
Colección Jorge del Prado
Este archivo fue entregado por su viuda, la reconocida artista plástica Etna Velarde. La investigación y catálogo del repositorio permitirá conocer las organizaciones políticas y movimientos sindicales en el siglo XX.
5. Las colecciones -Valcárcel y Cabieses- se identifican con la constitución de entidades culturales estatales dedicadas al quehacer cultural. La BI velará por su conservación y puesta en valor: los medios electrónicos ofrecen la difusión de ambos bienes. La consulta física de las colecciones en la sede del Ministerio de Cultura consolida la herencia de ambos pensadores. La colección del Prado es una veta en la investigación del movimiento sindical peruano.
Este archivo fue entregado por su viuda, la reconocida artista plástica Etna Velarde. La investigación y catálogo del repositorio permitirá conocer las organizaciones políticas y movimientos sindicales en el siglo XX.
5. Las colecciones -Valcárcel y Cabieses- se identifican con la constitución de entidades culturales estatales dedicadas al quehacer cultural. La BI velará por su conservación y puesta en valor: los medios electrónicos ofrecen la difusión de ambos bienes. La consulta física de las colecciones en la sede del Ministerio de Cultura consolida la herencia de ambos pensadores. La colección del Prado es una veta en la investigación del movimiento sindical peruano.
6. Una campaña óptima sobre la custodia, conservación y puesta en uso social de personajes decisivos en la gestión cultural peruana, destacando a Valcárcel y Cabieses, nos abrirán las puertas para otras donaciones y custodias que refuercen la memoria institucional.
7. Cerramos el año 2013 con 6,338 lectores, con tendencia a subir en el 2014. La BI tiene la particularidad de facilitar al ciudadano libros y archivos valiosos.
8. Leyes, normas, procedimientos, recomendaciones –nacionales e internacionales- valoran la existencia de bibliotecas (como UNESCO, Ley N° 28086-Ley de Democratización del Libro y de Fomento a la Lectura, Lineamientos de Política Cultural para los años 2013-2016).
Expresamos nuestra preocupación por el destino de la Biblioteca Institucional de persistir en embalar las colecciones sin la garantía de una reinstalación inmediata. Lamentablemente, por experiencias propias y ajenas, sabemos… que generalmente en nuestro país lo transitorio es permanente: no deseamos que eso suceda con la Biblioteca.
Solicitamos tengan a bien averiguar si existe sustento técnico para modificar la estructura orgánica de la Biblioteca Institucional y el destino laboral de sus trabajadores.
Atentamente,
Teresa Bazán Ramírez
Carlos Coronado Flores
Flor de María Gonzales Espinoza
Fedora Martínez Grimaldo
Carlos Coronado Flores
Flor de María Gonzales Espinoza
Fedora Martínez Grimaldo
Comentarios